La Formula 1 es una categoría que no sólo está llena de un trabajo incansable y constante, sino que también de sueños y esperanzas. Especialmente, todos los pilotos que empiezan desde muy pequeños tienen siempre una meta: llegar a la Formula 1. Uno de esos niños que soñaba con todo ha sido Max Emilian Verstappen.
Viniendo de una familia de pilotos, siendo su padre uno reconocido, pero con pocos éxitos como es Jos Verstappen, el pequeño Max nació un 30 de septiembre de 1997 en una localidad muy cercana entre la frontera entre los Países Bajos y Bélgica. Siempre apoyado por su padre mientras que él competía en la F1, empezó a correr en karting a los 7 años.
Su primera parada fue la Clase Mini del campeonato de karting de Bélgica, dónde arrasó durante dos años consecutivos. Además, en 2006, consiguió la Rotax Max Challenge de Bélgica. Al año siguiente, decidió también competir en los Países Bajos, ganando tres de las cuarto competiciones en las que ganó.
Y así siguió y siguió durante los siguientes años hasta llegar a los campeonatos europeos y mundiales de karting. En esas distinciones, como en el resto de promociones por las que había pasado, arrasó, ganando varios campeonatos mundiales hasta el año 2013. En total, en 7 años que estuvo en karting, ganó 25 títulos nacionales e internacionales y se batió con promesas que se encontraría en un futuro en lo más alto, como Charles Leclerc o George Russell.
Tras el 2013, con ya todas las competiciones de karting ganadas, Max dio el salto. En octubre de ese último año en karts, Verstappen probó por primera vez un monoplaza en el circuito inglés de Pembrey con lo que hoy en día es MP Motorsport. No fuer la única prueba, pues probó para Motopark y el equipo Josef Kaufmann en circuitos como Jerez o Valencia.
No hace falta decir que, al igual que en los karts, el joven Max Emilian destacó por encima de su competencia. Esto le hizo ganarse su primer asiento en una categoría, haciendo su debut el 16 de enero de 2014 en una novedosa categoría, la Florida Winter Series. En su debut en Sebring, su mejor resultado fue una cuarta plaza, pero en Palm Beach lograría su primera victoria, algo que repetiría en Homestead-Miami en la última prueba.
Esas dos victorias, sumadas a otros tres podios, hicieron que Max quedara en tercera posición, por delante de pilotos que más tarde no tendrían apenas reconocimiento. El campeón fue el italiano Antonio Fuoco (actual miembro del equipo de resistencia de Ferrari) y el segundo cayó en las manos de Nicholas Latifi (el destino unió antes a estos dos que ese final en Abu Dabi 2021). En ese año, también hubo pilotos como Tatiana Calderon o Lance Stroll.
Esas buenas actuaciones le hicieron ganar un asiento en Van Amersfoort en el Campeonato Europeo de la Formula 3. Aquí coincidió con futuros compañeros de F1 como Ocon, Latifi o Giovinazzi, pilotos de IndyCar como Tom Blomqvist o Félix Rosenqvist o de Formula E como Jake Dennis o Nick Cassidy.
Al final, Verstappen repitió posición al quedar tercero, por detrás de Blomqvist y Ocon. A pesar de retirarse ocho veces, el belga consiguió diez victorias, seis incluso de manera consecutiva (vaya, un spoiler del 2023), ganando en circuitos como Spa, Imola, Hockenheim o Nurburgring. Además de la F3, compitió en el GP de Macao, dónde acabó séptimo, y el Masters de F3, dónde ganó la carrera en Zandvoort.
Todo esto sucedió en un mismo año, 2014, aunque el año no acabaría. Y es que, tras estas grandes actuaciones, todos los equipos importantes de la F1 se fijaron en él. Mercedes, Ferrari, pero sobre todo, Red Bull, fueron algunos de los equipos que se interesaron. Sin embargo, la propuesta del equipo de Milton Keynes fue tan buena que los Verstappen lo aceptaron de inmediato.
Pero, exactamente, ¿qué incluía esta propuesta? Muy sencillo: un asiento titular en Toro Rosso. Y así fue. Vergne se marchó y Max ocupó su lugar en el equipo de Faenza. Eso sí, Max Emilian haría su debut antes del GP de Australia 2015, en los primeros libres del GP de Japón 2014, dando unas buenas impresiones. Al final, por giros del destino, en 2015 le estaría acompañando Carlos Sainz.
Entonces, llegaría Australia 2015 y con 17 años y 164 días de edad, se convertía en el más joven de la historia en competir en una carrera. A la carrera siguiente, consiguió sus primeros puntos y su mejor resultado fue en el GP de Hungría, dónde logró una cuarta posición, batiendo por mucho a su compañero Sainz.
Esto le hizo ganar la confianza más absoluta de la marca y eso se vio reflejado en 2016, cuando decidieron subirle al equipo A en el GP de España. En esa misma carrera, por cosas del destino y por su velocidad, consiguió su primera victoria a sus 18 años y 228 días. El resto, como dicen, es historia. Logró victorias esporádicas en 2017, 2018, 2019 y 2020 y todo explotó en 2021, dónde ganó su primer título mundial.
Después de terminar con el dominio de Hamilton y consolidarse en lo alto, Verstappen llegaba a la temporada 2023 en busca del tricampeonato. Después de unas primeras carreras dando un toma y daca en victorias con su compañero Pérez, Verstappen sacó la apisonadora y consiguió diez victorias consecutivas, algo nunca antes visto.
Después de sumar su peor resultado al ser quinto en Singapur y volver a ganar en Japón, a Max le bastaba con ser sexto en la carrera al sprint en Catar para asegurarse el título, algo que ha superado con creces al ser segundo. De esta forma, Max consigue algo que desde, técnicamente, 1983 y lo consiguió alguien vinculado a él como lo es Nelson Piquet: ganar un título en sábado.
Con este campeonato, además, consigue algo que gente como pilotos como Schumacher, Vettel, Hamilton o Fangio han podido hacer: ganar tres campeonatos de manera consecutiva. En términos de número de campeonatos, además de empatar con su suegro a número de títulos, ha hecho lo propio con leyendas como Ayrton Senna, Niki Lauda, Jackie Stewart o Jack Brabham.
Ahora la pregunta es: ¿Todo esto se quedara aquí o Verstappen puede ir a por más? La respuesta, en principio, es bastante sencilla de responder: ir a por más. Y es que Red Bull está en una época de dominio absoluta y Max puede aumentar su cuenta de victorias (48, superando a gente como Senna) y de títulos. ¿Podrá igualar y/o superar el récord de Hamilton o Schumacher? Sólo el tiempo lo dirá.