




Las calles de Londres ha vuelto a acoger dos carreras de Formula E, concretamente las dos últimas del calendario, que pueden decidir quién es el nuevo campeón, y de hecho, así ha sido. Tras la primera carrera, Jake Dennis se proclamaba campeón de la categoría. Con horas de descanso, tendríamos la segunda carrera en unas condiciones muy complicadas y con la presencia del Safety Car.
Una pista muy resbaladiza provocaría que la FIA quisiera priorizar la seguridad de los pilotos, sacando de esta forma en la vuelta 5 de carrera la primera bandera roja de la sesión. Tras el parón de 30 minutos, los coches han vuelto a la pista para comprobar las condiciones meteorológicas pero tras una nueva vuelta bajo Safety Car, los pilotos fueron obligados a volver a boxes, debido a la poca visibilidad para conducir.
Tras un nuevo parón, aún más largo, en la vuelta 8 de carrera se iniciaba la competición con un Nick Cassidy descomunal liderando todas y cada una de las vueltas de carrera y muy pocos adelantamientos a lo largo de la carrera. En la vuelta 15, Ticktum conseguía el mejor adelantamiento de la jornada y de hecho, tras un error de Mortara que casi se va contra el muro y su abandono, se vio superado por un Ticktum que venía apretando fuerte.
Con un Sebastian Buemi y un equipo Envision que ya se veían ganadores del mundial de pilotos, Buemi conseguía escalar al top 6 tras un gran adelantamiento por el exterior al piloto del equipo Jaguar, Sam Bird. Tras unas ultimas vueltas intensas, Nick Cassidy conseguía una nueva victoria para su palmarés, que le servirá de poco con el mundial de pilotos perdido el pasado sábado.
En segunda posición acabaría Mitch Evans y, acabando la temporada por todo lo alto, en tercera posición Jake Dennis. De esta forma, la temporada de la Fórmula E llegaba a su fin, con un Jake Dennis espectacular consiguiendo el campeonato y un equipo Envision que conseguía el mundial de constructores, demostrando ser los más eficaces de todo el campeonato.




