Buenas sensaciones para Ryan Hunter-Reay en Indianápolis: "El equipo hizo un gran trabajo"

Este pasado jueves todos los pilotos de la IndyCar han disfrutado de una jornada de test en el Indianápolis Motor Speedway. El tiempo más rápido del día se lo llevó Josef Newgarden mientras que, Ryan Hunter-Reay consiguió ser tan solo decimocuarto, con un total de cincuenta y nueve giros al trazado norteamericano.

El piloto del equipo Andretti, nacido en Dallas ha reconocido sentirse feliz y satisfecho tras su vuelta con el equipo Chevy: "Ha sido genial. En la primera salida me sentí como un niño bajando una rampa, esa sensación de pura emoción. Fue impresionante. Como dijo Stef, el equipo ha hecho un gran trabajo preparando estos coches".

"Realmente feliz de unirme al equipo Chevy de nuevo. Tenemos una gran historia juntos, no solo respecto a coches deportivos con GM, Cadillac y todo lo demás, sino también ganando un campeonato juntos en 2012. Tengo muchos buenos amigos allí. Estoy deseando trabajar con ellos". Igualmente, tenía ganas de volver a trabajar con el equipo y así lo ha demostrado con sus declaraciones.

"Trabajar con el equipo ha sido excelente. Estábamos pasando por algunos aspectos bastante complicados, sobre todo, por el viento. Al inicio, las ráfagas de viento han sido realmente extrañas para mí, no me ha gustado esa parte. Quería pasar por eso lo más rápido posible. Era como comerse las verduras de niño. No era divertido, pero lo superé rápido".

"Después de eso, disfruté mucho más encima del coche". Seguidamente, ha analizado las sensaciones que tiene un piloto cuando corre por primera vez en un ovalo como el de Indianápolis y cómo van evolucionando los sentimientos con el paso de las vueltas y la experiencia con el viento: "Cada vez que vas a un ovalo por primera vez, podría ser por primera vez en unas pocas semanas, en un mes, las primeras vueltas estás un poco tenso".

"Puedes sentir como todo tu cuerpo se va inclinando progresivamente. No es necesario hacerlo, pero de esa manera consigues ir al límite. Una vez que vas cogiendo la medida del circuito, empiezas a relajarte en las curvas con el coche. Como dijo Josef, el viento resultaba incómodo, era impredecible a veces. Hacías tres vueltas seguidas, entonces de repente tenías una gran corriente de aire en el morro. Salía de la nada".

"Te cuestionabas si el coche estaba equilibrado, si era una ráfaga". Para finalizar sus declaraciones, redundaba nuevamente en el buen rendimiento de su vehículo y el gran trabajo previo que había realizado todo su equipo: "En general, el coche era genial. El ajuste del coche era genial. No cambié ni una cosa dentro del ajuste del coche desde que empecé. Estoy muy contento. El equipo hizo un gran trabajo".