Da Costa habla de su trayectoria en la Fórmula E: "Al principio parecía una locura"

La evolución de la Formula E desde sus comienzos no ha dejado de ir en ascenso. La categoría, que nació con el espíritu de albergar carreras con coches 100% eléctricos se ha convertido en una ventana muy óptima para las marcas en el nuevo mercado del automóvil sostenible. Cada temporada la evolución es mayor y los coches disponen disponen más potencia y mejoran sus prestaciones.
Esto también se ha convertido en un atractivo para los pilotos. Un ejemplo de esto último es Antonio Félix da Costa, que vive ahora una etapa muy competitiva desde sus inicios en la categoría: "Debuté en noviembre de 2014 en Malasia. Fue fascinante pero súper duro. Sobre todo porque hacía mucho calor en el coche y era muy exigente físicamente".
"Aun así puntué y tuvimos un buen fin de semana, pero recuerdo estar súper cansado al final. Ese año también competí en el DTM, así que hubo algunos choques. No pude disputar la primera carrera de Fórmula E en Pekín, así que mi primer evento fue la segunda carrera de la historia de la Fórmula E". Y es que el campeonato se ha convertido en una de las alternativas principales para pilotos que se quedan sin asiento en la Fórmula 1.
El propio Da Costa, Pascal Wehrlein, André Lotterer, Jarno Trulli o Jaime Alguersuari son solo algunos ejemplos: "La Fórmula 1 era mi sueño. Tenía un pie en la puerta como piloto de pruebas de Red Bull Racing. La idea de competir en un campeonato de carreras totalmente eléctricas parecía una locura. Para ser honesto, no estaba en el mejor estado de ánimo en ese momento".
"Pero rápidamente me embarqué en la Fórmula E. Cada vez era más consciente de la misión y las posibilidades de la Fórmula E en un mundo cambiante. Para mí, era y sigue siendo un reto apasionante demostrar en la pista que los coches eléctricos no son aburridos, sino rápidos y eficientes. No tardé en darme cuenta de que esta serie tiene un futuro brillante".
Con un calendario de circuitos exclusivamente urbanos en los principales enclaves del globo terráqueo, la categoría maximizó su visibilidad y ahora son muchas las oportunidades comerciales que se abren para el devenir de los coches eléctricos: "Es increíble ver lo lejos que ha llegado la Fórmula E. Y lo mismo puede decirse de los circuitos, los pilotos, los equipos y los aficionados".
"Hoy puedo decir sinceramente que unirme a la Fórmula E ha sido la mejor decisión deportiva de mi vida. He ganado carreras y el título de campeón. Es genial ver cómo la aceptación de la Fórmula E ha ido creciendo temporada tras temporada en todo el mundo. Es fantástico ver lo lejos que hemos llegado en sólo nueve años".
"No esperaba que la Formula E funcionara tan bien tan rápido. Estoy muy contento de cómo ha ido. Creo que en países como India o Sudáfrica no deberíamos limitarnos únicamente a entusiasmar a la gente con el automovilismo. La Fórmula E representa mucho más, por ejemplo, la sostenibilidad e importantes valores sociales como la inclusión y la diversidad. Deberíamos aprovechar la oportunidad para sensibilizar y reforzar la concienciación entre las personas que vienen a vernos al circuito".
Para finalizar, el piloto de Porsche cree que el campeonato vive una inevitable expansión que acabará atrayendo a las grandes marcas de coches. Y señala en este sentido el papel Porsche, su escudería: "Han pasado muchas cosas en este sentido en los últimos años. El mero hecho de que la Fórmula E sea ahora un mundial y que un fabricante de automóviles de éxito como Porsche esté involucrado es una señal de hacia dónde avanza el futuro".