Juan Pablo Montoya desea que su hijo llegue más lejos que él y lo veamos en la F1

Juan Pablo Montoya, expiloto de la Fórmula 1, es noticia en la actualidad, pero no por su desempeño en pista o por su participación en algún box, sino por que tiene a su hijo Sebastián dando sus primeros pasos en las grandes categorías. De hecho, el joven de 17 años ya está confirmado para hacer parte del equipo HitechGP de Fórmula 3, todo bajo la supervisión de la academia de jóvenes pilotos de Red Bull.

Sobre el hecho, Juan Pablo está muy orgulloso, más que nada por que sabe lo difícil que es llegar a la máxima categoría del automovilismo, y al tener a su hijo en un equipo de F3, la esperanzas de verlo con los grandes es posible. "Creo que es una buena experiencia de aprendizaje. Espero que funcione para Seb, espero que pueda hacer el trabajo, cumplir y conseguir una oportunidad con Red Bull".

"Pero al final del día, creo que es un gran paso y un gran paso de aprendizaje para él. Y lo va a aprovechar", comentó a la web motorsport.com. Otro de los aspectos que motivan a la familia Montoya es la manera de afrontar estos desafíos, pues en palabras del padre, Sebastián es un piloto sereno y calmado que no le pesan estos retos:

"Me estoy muriendo aquí y él es el tipo más tranquilo. Como si no hubiera drama y todo fuera bien. Me sorprende. Es genial verlo así". De la incorporación a la academia de Red Bull, Juan Pablo también detalló que será interesante la asesoría de Helmut Marko en el proceso y evolución de su hijo, ya que el mismo lo tuvo como jefe, definiendo esa etapa como dura, pero que al final lo ayudó a ser mejor piloto.

"Helmut siempre decía que yo tenía muchos problemas, que estaba loco y todo eso. Pero me empujó a ser siempre mejor persona. Es difícil porque ahora muchos chicos necesitan que les hablen con dulzura y Helmut es más como yo, es más del viejo estilo. Estoy emocionado. Creo que Sebas tiene aquí una oportunidad muy buena de aprender mucho de ellos y creo que parte del programa de entrenamiento es muy bueno. Lo tienen todo", finalizó.

Lo que si está claro es que Sebastián Montoya tiene un futuro prometedor, pues tiene la confianza de su padre, el asesoramiento y entrenamiento de un reconocido del negocio como Marko, y la oportunidad de seguir creciendo, primero desde la academia, y luego a nivel competitivo en la Fórmula 3.