Porsche restaura el 959 París-Dakar ex-Jacky Ickx de 1986

La historia es un punto vital para las marcas de coches, y más aún cuando se trata de un pasado tan gloriosos como el de Porsche. La marca germana sabe lo que es ganar dentro y fuera de los circuitos, e incluso en parajes tan poco asociados con esta firma como es el desierto. Un historial del que forma parte del Porsche 959 París-Dakar con el que Jacky Ickx se alzó con la victoria en el Dakar de 1986.
Unidad que ahora ha vuelto a la vida de la mano del Departamento de Patrimonio y Museo Porsche y Porsche Classic. Range Rover, Mercedes G o Mitsubishi Pajero habían sido los ganadores de las primeras ediciones del Dakar en la categoría de coches. Grandes todoterrenos que se movían como pez en el agua por el largo recorrido entre París y Dakar, aunque poco tardarían otras marcas en reaccionar.
Renault fue la primera que acabó con el reinado de los grandes 4x4 con el Renault 20, que se llevaría la victoria en 1982. Porsche también se adentraría en esta historia con su 953, logrando la primera posición dos años después. Mientras que en 1986 saltaba la sorpresa con una nueva obra de la casa germana, el 959.
El equipo de desarrollo necesitó dos años en la década de 1980 para transformar el 959 en un coche de rallye. El departamento de competición de la marca reforzó el chasis, incluyeron amortiguadores dobles en el eje delantero y montaron neumáticos todoterreno. Además trabajaron en el diferencial central para adaptarse a las condiciones del terreno, distribuyendo la potencia entre sus dos ejes y permitiéndole alcanzar los 210 km/h de punta.
Un modelo del que tomaron parte tres unidades en el Dakar de 1986, logrando la victoria con el dúo formado por René Metge y Dominique Lemoyne. Y desde Porsche aseguran que la unidad ganadora se conserva totalmente intacta y que aún mantiene las huellas de su paso por el desierto. Pero desde la marca han querido devolver una unidad a sus orígenes y han optado por la subcampeona de dicho año, que estaría en manos del ex-piloto de Fórmula 1 Jacky Ickx.
Así ha explicado el proceso Uwe Makrutzki, Director de Restauración de Fábrica de Porsche Classic: “El 959 París-Dakar fue un escaparate tecnológico en su momento y por eso resulta emocionante restaurarlo. En 1986, su llegada supuso un desafío para la industria del automóvil. Hoy, en cambio, somos nosotros los que vivimos el desafío".
"El estado del vehículo era muy bueno cuando comenzó la restauración. No había grandes deformaciones ni corrosión. Al igual que con cualquier restauración que persigue el objetivo de conservar la originalidad en la medida de lo posible, el equipo examinó cada componente de forma individual”. Una vez completado el proceso, Porsche optó por juntar de nuevo a la máquina con el piloto.
Jacky Ickx asistió a una jornada en la que pudo volver a ponerse al volante del 959 en una cantera. Un día de recuerdos para el piloto. "Me vienen a la cabeza todas las personas que participaron en aquel Dakar de 1986. El 959 de calle era un coche muy deseado, todos querían conducirlo en la carretera, y en ese momento Porsche decide enviar uno a un rallye en el desierto. Es fantástico formar parte de esta historia”, afirma Ickx.
Este renacido Porsche 959 será uno de los grandes protagonistas en el salón del vehículo antiguo Retro Classics, en Stuttgart, que tendrá lugar del 23 al 26 de febrero. De hecho, esta unidad formará parte de la exhibición especial “75 años de deportivos Porsche”. Y para los que no puedan acudir a esta cita, Porsche ha preparado un pequeño documental del proceso de restauración que se podrá ver en su canal de YouTube.