Pascal Wehrlein vence en una sufrida, explosiva y entretenida carrera en Diriyah

La Formula E ha iniciado su primer fin de semana de carreras doble con una entretenida, explosiva y muy disputada carrera. Los pilotos de la categoría eléctrica ha ofrecido a los espectadores una de las mejores carreras de una temporada que apenas está iniciando, con batallas por todos los lados y cambios de posición constantes.

La carrera empezaba con una mala noticia para el equipo Maserati, con uno de sus pilotos, Max Günther, sin poder competir tras su accidente en clasificación. Con esto en cuenta, se iniciaba la carrera, con Buemi desde la pole, seguido de Jake Hughes y de Sam Bird. En la salida, esto no cambiaba, ya que se mantenían las posiciones.

Eso sí, los accidentes llegaron por detrás. Y es que Antonio Félix da Costa chocaba con el Mahindra de Oliver Rowland, lo que generó el único Safety Car de la carrera. No sólo únicamente hubo un SC, sino que éste apenas duró una vuelta. A la resalida, las posiciones se mantenían en los primeros compases. Sin embargo, esto no duraría mucho.

Y es que Sam Bird mostraba un ritmo inicial endiablado, adelantando a Hughes para colocarse segundo. Poco después, en el giro 7, el británico se colocaba líder de la carrera al pasar a Buemi. El británico se escapaba con respecto a sus perseguidores, mientras que, por detrás, René Rast y Mitch Evans sufrían salidas de pista. Otro que tenía un incidente era Sacha Fenestraz, que perdía el alerón delantero.

Los Attack Mode iban poco a poco apareciendo y las cosas se apretaban. Wehrlein, que salía desde fuera del top 8, llegaba lentamente a las posiciones de cabeza y llegaba a la cuarta posición. El teutón aprovechó mejor el Attack Mode, el cuál hizo caer posiciones a gente como Hughes o Buemi. Con esto, el de Porsche se colocaba en la tercera posición.

El buen ritmo del piloto germano, además, le hacía acercarse a Buemi y luchar por la segunda plaza. No sólo eso, sino que Bird no se conseguía despegar de sus perseguidores tras activar el Attack Mode. El británico sufría y veía como se acercaban sus perseguidores. Por eso, decidió usar sus últimos minutos de Attack Mode para asegurar el triunfo.

Sin embargo, Wehrlein conseguía la segunda plaza, ya que Buemi también usó el Attack Mode y cedió esa segunda posición. El ritmo del Porsche era sublime y, por eso, atacó a falta de 15 vueltas del final por el liderato, aunque se pasó de frenada la primera vez. En el segundo intento, el teutón no fallaba y conseguía el liderato.

Otro que también venía de detrás era Jake Dennis. El piloto de Andretti salía desde la undécima posición y, sin hacer mucho ruido, fue escalando poco a poco hasta estar en cuarta posición. Con Buemi usando sus últimos minutos de Attack Mode, el británico subía al podio y, de a poco, se iba acercando a la posición de Bird.

A menos de 4 vueltas para acabar, Dennis pasaba a Bird y se ponía a la altura de Wehrlein. El de Andretti intentaba la machada, pero se quedó en la orilla. Finalmente, en una línea de meta muy ajustada, Pascal Wehrlein conseguía la victoria para Porsche en la segunda carrera del campeonato. El expiloto de Sauber mostró un ritmo impresionante, saliendo desde posiciones traseras para acabar en lo más alto.

En segunda posición, terminó Jake Dennis, con otra actuación magnifica, remontando desde la undécima plaza hasta la segunda. Completó el podio Sam Bird, que también mostró un ritmo inicial muy bueno, pero que se fue diluyendo con el paso de las vueltas. Buemi y Rast completaron un top 5 que deja un panorama interesante en el campeonato de cara a la tercera cita. La diferencia entre Jake Dennis y Pascal Wehrlein es de sólo 1 punto, por lo que todo puede pasar.