El 2018 de Force India
Repasamos la atípica temporada de la escudería Force India, marcada por los cambios en la dirección y el adiós de la F1 por parte de Esteban Ocon.
La pretemporada de Force India
La pretemporada de Force India comenzó, como la de muchas escuderías, con la presentación de su nuevo monoplaza, el VJM11, directamente en el pit lane de Barcelona. El cual seguía de cerca la línea de diseño marcada por su exitoso predecesor y volvía a caracterizarse por el color rosa de su patrocinador BWT. Así, comenzaba un año atípico para la marca. Por su parte, Checo Pérez y Esteban Ocon marcaban como uno de sus objetivos mantenerse fuera de los líos internos en pista.
Los test de pretemporada no auguraban un buen año, y alejaban a Force India de la lucha por mantenerse como el cuarto mejor equipo de la parrilla, o lo que es lo mismo, el primero de los mortales.
La temporada de Force India
La temporada no comenzaba bien para el equipo, y en Australia no consiguieron meter ninguno de sus monoplazas ni en la Q3 ni entre los diez primeros al concluir la carrera. Las sensaciones dentro de la escudería no eran buenas, pero en Bahréin, a pesar de una horrible carrera de Checo, Ocon estrenaba el casillero de puntos con una merecida décima posición.
El rendimiento mostrado en pista no era suficiente para mantenerse entre los mejores y estaban lejos de los objetivos propuestos desde la directiva de Force India. Una nueva carrera “a cero” hacía a la escudería abandonar el GP de China con más dudas que certezas. Y así llego Bakú, una loca carrera donde los pilotos volvieron a mostrar la cara y la cruz del equipo, contrastando el abandono de Esteban con la impresionante tercera posición de Sergio, el cual dio un golpe sobre la mesa y sumó sus primeros 15 puntos.
Tras las primeras cinco carreras las dudas seguían sobrevolando el box de la escudería. La escasa cosecha de puntos conseguida por sus pilotos, especialmente por Ocon, que solo llevaba un punto, no hacía presagiar nada bueno. Por ello, las reacciones no se hicieron esperar, y tras el GP de Mónaco el empresario de origen indio y jefe de la escudería, Vijay Mallya, era cesado de su puesto y el equipo se veía condenado a una posible venta.
Sin embargo, los resultados seguían sin llegar, y los logros del equipo se resumían en llegar a la Q3 o puntuar con alguno de sus monoplazas en novena o décima posición. Por ello, el paddock comenzó a llenarse de rumores que hablaban de la posible salida de Force India de la Fórmula 1, teniendo incluso los pilotos que desmentir en numerosas ocasiones las noticias. El GP de Austria fue un punto de inflexión para la marca, que cruzó la línea de meta con sus pilotos en sexta y séptima posición, siendo esta la primera vez que ambos pilotos puntuaban en la misma carrera. Antes del parón, la escudería parecía resurgir con ambos monoplazas en los puntos, pero durante las vacaciones se puso de nuevo en duda la continuidad del equipo en la competición.
Y ahí nació un nuevo Force India, o mejor dicho Racing Point Force India F1. El padre del joven piloto Lance Stroll, Lawrence Stroll, salvó a la escudería de la quiebra y garantizó su continuidad hasta el final de temporada. Debido al cambio de propietarios, el casillero de puntos del equipo se quedó a cero, algo que duró poco tras el magnifico GP de Bélgica en el que Checo y Esteban fueron quinto y sexto, algo que se confirmó de nuevo en Italia y Singapur.
Ya las últimas carreras del campeonato, en las que Racing Point defendía la séptima posición, estuvieron marcadas por el significativo adiós de Esteban Ocon. El piloto francés trató de buscar un nuevo equipo con sus buenas actuaciones en pista, pero por desgracia para él y para la categoría no contará con una plaza la próxima campaña. Estar ligado a Mercedes le cerró muchas puertas y la próxima temporada deberá ver la competición como tercer piloto de los de Brackley, esperando poder volver en 2020.
La anécdota de Force India
Uno de los momentos que caracterizará el reciente acabado campeonato de Fórmula 1 fue lo sucedido en Brasil entre Esteban Ocon y Max Verstappen. Una inexplicable acción en la primera curva que acabó con ambos a empujones dentro de la sala de pesaje de la FIA.
Todo sucedió cuando el piloto holandés tenía en el bolsillo una merecida victoria y sacaba cierta distancia al segundo clasificado, Lewis Hamilton. La tragedia llegó cuando Esteban, que era algo más rápido por haber cambiado gomas, trató de desdoblarse en la curva uno, algo que Max no vio con buenos ojos. Verstappen no pareció dispuesto a cederle la posición, y en la insistencia de Ocon ambos monoplazas se tocaron y trompearon, con peineta incluida por parte del piloto de Red Bull.
Esto le costó la victoria a Verstappen, y el holandés quiso escenificar su cabreo empujando en repetidas ocasiones a Ocon dentro de la sala pesaje de la FIA. El encuentro se solucionó con una sanción en pista para el piloto de Force India y fuera de ella para Max.
Los conflictos de Force India
Los conflictos de Force India, al contrario que en la anterior temporada, han tenido lugar fuera de la pista. La intención de los focos ha estado más pendiente del cambio en la dirección que de los propios pilotos. Con ello, y con la llegada de Lawrence Stroll, muchos señalan como uno de los grandes errores de la escudería dejar marchar a un gran piloto como Esteban Ocon, el cual ha mostrado siempre gran rendimiento en pista y un gran compromiso con el equipo.
El futuro de Force India
Temporada atípica para la marca, que a mitad de temporada temieron por la desaparición del equipo. Ya bajo los mandos de Lawrence, se ha anunciado que el nombre definitivo que registrarán la próxima campaña, se desvelará antes del comienzo de la misma. De momento ya han excluido el término Force India y se han quedado con un escueto Racing Point. El tiempo lo confirmará, pero las declaraciones de la nueva dirección apuntan a que posiblemente hayamos vivido la última temporada de la mítica escudería como tal, aunque sede y trabajadores se mantendrán en sus puestos.
La temporada también acaba con el anuncio de la contratación de Lance Stroll, que correrá en el equipo de su padre, algo que ya se suponía desde hacía algunos meses, pero que no se ha oficializado hasta ahora.