El equipo de redactores de PitLane F1 dedica unas palabras al bicampeón español tras decir adiós, quién sabe si de forma provisional, a la categoría reina del automovilismo.

Beatriz Cubero

"Cuando tenía apenas 9 años mi padre estaba viendo unos coches de colores dando vueltas a un circuito. No recuerdo qué carrera era. Solo sé que ahí, viendo a un tal Fernando Alonso que empezaba, me enganché. Hubo que esperar para verte cruzar el primero la meta, pero jamás se me olvidará aquel 24 de agosto. Acababas de lograr lo imposible. Pero ese fue solo uno de los tantos momentos que he vivido contigo. Las temporadas 2005 y 2006, disfrutando como nunca, viviendo las carreras ¿sentada? frente al televisor, sin despegar la mirada. Aquella tarde de Brasil gritando el "TOMA, TOMA" por la ventana de mi salón para avisar a todo el mundo de que un asturiano acababa de ganar un Mundial de Fórmula 1. Aquella madrugada de Japón despertando a gritos a mi familia cuando amarramos el segundo título. Vinieron tiempos más complicados y sufrí al ver que no conseguías aquello que merecías (y mereces). Pero seguí pegada al televisor, apoyándote de forma incondicional. Fueras vestido de azul, rojo o blanco.

Viví un ambiente complicado con los tifosi, cuando fui por primera vez a verte en Italia, en 2006. Aquella sanción, de la que me enteré en el hotel, tampoco se me olvidará. Pude disfrutar con toda la afición en Montmeló, en 2008, aunque no terminó como todos hubiésemos querido. Tuve la suerte de verte ganar con Ferrari en Monza, en 2010. Y volví a Barcelona para verte luchar con el McLaren-Honda. Aprendí a amar este deporte viéndote correr. Y por ello te doy las gracias, Fernando".

Cristina Madueño

"Yo era una niña cuando me senté por primera vez a ver una carrera de F1. Últimamente había visto mucho revuelo en las noticias, en la radio y en todas partes con alguien llamado Fernando Alonso Díaz que, al parecer, estaba revolucionando la Fórmula 1 y a España. Parecía que algo grande estaba ocurriendo, podía sentirlo, y yo quería formar parte de aquello. No recuerdo qué carrera era, pero sí recuerdo que me senté con mi prima pequeña y mi hermano enfrente de la tele, impacientes por ver ese circo. A partir de ahí no me perdí ni una carrera más. Me levantaba a hurtadillas cuando aún todos dormían o nos sentábamos toda la familia junta a verla cuando la carrera era a una hora menos intempestiva. Me compraba todos los periódicos para coleccionar noticias y portadas, escuchaba todos los programas de radio donde sabía que iban a hablar de F1 y grababa todos los reportajes de la tele. Descubrí la Fórmula 1 gracias a ti, Fernando. Despertaste una pasión en mí y me ayudaste a distraerme en un año 2005 que fue sumamente duro con varias pérdidas en mi familia. Desde entonces han pasado muchos años, épocas mejores y peores, pero con unas ganas y fe inquebrantables que continúan todavía hoy. Te seguiremos acompañando en tus nuevas aventuras, pero también esperamos verte de vuelta otra vez en la F1, esa que nos ha dado tanto y que aún te debe algunas cosas. Por todo, gracias, Fernando".

Guillermo Córdoba

"Empecé a ver la Fórmula 1 a los ocho años gracias a ti, Fernando. Mi abuelo y yo compartíamos sofá en cada carrera, disfrutábamos de cada victoria, de cada podio, de cada adelantamiento. Madrugábamos para ver cómo se apagaba el semáforo y vivíamos cada vuelta con ilusión. Sufrí detrás del alerón de ese Renault bajo la noche de Abu Dabi, me ilusioné con ese doble adelantamiento a Webber y a Massa en esa lluviosa tarde de Brasil y me resigné viendo cómo los años pasaban y tu tercer título no llegaba. Me enamoré de la Fórmula 1 gracias a ti, pero llevaba varios años queriendo que abandonaras esta competición. Te he seguido en Le Mans y te seguiré en las 500 millas de Indianápolis. Te seguiré allá donde vayas porque eres una leyenda, un ídolo imprescindible. Gracias".

Víctor Treviño

"Llegó ese momento que nunca quise que llegara. Tu adiós (espero que no definitivo) de la Fórmula Uno. Ese deporte que empecé a ver ya ni me acuerdo cuándo gracias a un asturiano que empezaba a despuntar. Me contagiaste la fiebre del automovilismo y desde entonces mi vida cambió. Aquella victoria un día de agosto de 2003 en Hungría fue el principio de algo muy grande. Después llegó el mano a mano con un tal Michael Schumacher en Imola en 2005. Aquel día me quedé sin uñas. Pero fue algo mágico e inolvidable. Tampoco olvidaré aquel Gran Premio de Japón de 2006. Estaba de viaje con mi familia y el grito de alegría despertó a todo el edificio. Otra vez lo volviste hacer. Brasil fue un escenario especial. Pocos éxitos deportivos me hicieron sentir tan feliz. ¿Un ascenso de tu equipo local? ¿Un mundial de tu selección? Sí, pero esto era diferente. Mágico. Madrugones, domingos pegado a la televisión para verte, sufrimiento en los malos momentos, alegría en los buenos y todo un viaje que estoy seguro que todavía no ha acabado. Cumplí un sueño al verte correr en un circuito. Aunque para tristeza mía fue en las temporadas 2016, 2017 y 2018, tres años en los que ese McLaren no te ha permitido estar donde verdaderamente mereces. Ahora te seguiré allí donde vayas, la categoría es lo de menos. Porque sé muy bien que tú no eres un piloto de Fórmula 1, sino uno de carreras. De todas. Gracias de verdad".

Sergio Valverde

"Hace 15 años que descubrí la Fórmula Uno. Aquel Gran Premio de Brasil de 2003 acabaste contra un muro en medio de una lluvia torrencial de fibra de carbono y neumáticos. Me imagino que ese sufrimiento tras el accidente no será ni parecido al de estos últimos años. Las decepciones en Ferrari (¡tan cerca y tan lejos!) y los últimos años en McLaren no te han hecho justicia. Tampoco tus números. 32 victorias se antojan cortas y "solo" dos Mundiales parecen escasos con el nivel que has mostrado durante tantos años.

Es quizás por eso por lo que, con una sensación agridulce, puedo decir 'al fin'. Eres uno de los más grandes, Fernando, pero ya ha llegado la hora de buscar otros retos. El año pasado parece que lo entendiste, pero decidiste darle un último intento a la Fórmula Uno. Ahora toca buscar esa Triple Corona, de la que solo te falta una, y ya veremos qué más después. Suerte con tu reto, porque hagas lo que hagas, tus aficionados estaremos detrás".

Carlos Bleda

"Intentaré ser breve pues no soy capaz de reflejar tantas emociones y sentimientos en apenas unos párrafos. Y es que este momento, aunque sabía que llegaría, es difícil de asumir y los recuerdos se me acumulan. Era un crío cuando gracias a ti empecé a emocionarme con este deporte. Apenas tenía 11 años cuando grité y lloré de emoción con tu primer Mundial. Y tan solo un año más tarde repetiste la hazaña y de nuevo me hiciste soñar. Desde entonces son muchos los madrugones para verte, muchas las alegrías que me has dado… y también las frustraciones.

Jamás olvidaré el Gran Premio de San Marino en 2005, las carreras de Brasil de 2005 y 2006, el debut con Ferrari en 2010 y la victoria en esa misma carrera en Bahréin, la memorable y emocionante victoria en Valencia en 2012… y tantos otros momentos (no todos buenos, sobre todo en los últimos años).

Aunque tus 32 victorias y tus 2 Mundiales se me hagan escasos, tu leyenda está a la altura de los más grandes. Me consuela seguir viéndote hacer historia en Le Mans, la Indy o donde te propongas. No se puede resumir todo en un simple gracias, sin embargo… GRACIAS FERNANDO. Y AVANTI con lo que está por venir".

Miguel García

"Creo que nunca antes he tenido tantas dificultades para ponerme a escribir. Si soy sincero nunca he querido que llegara este día, es complicado expresar con palabras lo que un niño de tan sólo 8 añitos sentía al ver a su ídolo triunfar por el mundo a bordo de su Renault. Un sentimiento que nunca disminuyó con el paso del tiempo. Todo lo contrario, son tantos momentos que es difícil señalar uno como el mejor. Tu primera pole en Malasia, el primer triunfo en Hungría 2003 doblando a un 7 veces campeón del mundo, los pajaritos que aquel niño imitaba cada vez que te veía cruzar la meta en primera posición, los madrugones despertando a mi padre por no perderme un salida, la ilusión de verte triunfar en McLaren, o la increíble sensación de verte ganar vestido de rojo. Esa espinita de conseguir un título con Ferrari que en 2010 y 2012 se escapó con mucho dolor y que para muchos, sobre todo para los que basan su criterio en estadísticas y titulares de prensa, hubiera cambiado la historia, pero no para mí. Una ilusión que nunca se perdió y que aunque en los últimos tiempos ha sido difícil verte pelear en una parte de la clasificación que no hace justicia a tu talento, la pasión y los nervios por disfrutar cada segundo de ti en la pista han seguido con la misma intensidad del primer día.

Gracias por ser una inspiración para mí todos estos años, no hay duda de que lo seguirás siendo mucho tiempo con tus nuevas aventuras que seguiré al pie del cañón. Gracias por hacer que me enamorara de la F1, un mundo que no abandonaré jamás, y por ser una de las grandes motivaciones que he tenido durante años para ponerme delante de un ordenador a escribir y desarrollarme profesionalmente. Gracias por hacerme disfrutar y emocionarme cada fin de semana.

Por todo esto y por mucho más que no soy capaz de expresar, GRACIAS FERNANDO".

David Aragón

"Creo que hablo en nombre de muchos cuando digo que Fernando ha marcado nuestra agenda durante 17 años. ¿Cuántos nos hemos ido temprano a la cama porque el asturiano corría en Japón o en Australia? ¿Cuántos hemos rechazado una barbacoa porque Alonso corría? ¿Cuántos chiringuitos habrán tenido que instalar una pantalla de televisión porque veían que su clientela bajaba si había carrera? Alonso ha marcado a una generación, y para bien.

A muchos, entre los que me incluyo, nos ha enseñado que no hay mayor satisfacción en la vida que luchar hasta el final, consigas o no el resultado. Es la única manera de que no te puedas arrepentir de nada. Además de esta lección, Fernando nos ha enseñado una muy valiosa: no reniegues de ti mismo. Mejorar no implica a renunciar a ser tú mismo. Alonso se ha convertido en una leyenda de uno de los deportes más complicados del mundo siendo él mismo, siendo un chaval de Asturias.

Fernando Alonso forma parte de mi historia y ha colaborado con sus ladrillos en el edificio que soy hoy día. El gusanillo de la Fórmula 1 ya forma parte de mí y en lo que esté en mi mano, no me perderé una carrera. Mi novia llama a la Fórmula 1 "la otra", porque tiene que compartirme a ratos con ella. Y no solo ella. Mucha gente a mi alrededor se pregunta por qué veo esas carreras tan aburridas. Alonso era la respuesta y seguirá siéndola, aunque ya no esté.

Comencé viendo las carreras con Alonso en la pista y con mi padre al lado. Desgraciadamente, el 17 de marzo del 2019 madrugaré y ni Alonso estará en la parrilla en Australia ni mi padre estará al lado mía en el sofá. Pero, gracias a Fernando, yo estaré ahí. Gracias Fernando, te esperamos de vuelta en la Fórmula 1."

¡Buscamos redactores!

¿Te gustaría escribir con nosotros y ser parte de este equipo que cada día va a más? Si quieres más información, pincha aquí.