Hamilton impone su ley sobre Monza y asalta el liderato
Lewis Hamilton se lleva el Gran Premio de Italia tras una carrera sólida en la que dominó de inicio a fin. El británico se hace con el liderato del mundial. Valtteri Bottas acaba segundo y Sebastian Vettel, tercero. McLaren Honda firmó, una vez más, un doble abandono, mientras que Carlos Sainz acabó decimocuarto.
Monza siempre ha sido territorio Ferrari. Los de Maranello, que están de aniversario al cumplir 70 años, afrontaban el gran premio con la intención de agradar a sus fans y pegar un buen bocado a Mercedes en la clasificación de escuderías. Además, Sebastian Vettel debía aprovechar el tirón local para defender su liderato. Sin embargo, la extraña sesión de clasificación no favoreció a los de Ferrari. Lewis Hamilton se convirtió en hombre récord al superar las ‘poles’ de Michael Schümacher. Junto a él arrancará Lance Stroll. El joven de Williams sorprendió bajo la lluvia y se aprovechó de las penalizaciones de ambos Red Bull para copar la primera línea de salida. A Sebastian Vettel le tocaba remontar desde la sexta posición. Todos los pilotos optaron arrancar con el neumático superblando, a excepción de Alonso, Verstappen, Ricciardo y Palmer.
El semáforo se apagó y ya en los primeros metros Esteban Ocon se quitó de encima a Lance Stroll. El francés realizó una gran salida y se puso tras el británico de Mercedes. Por detrás, Bottas se convertía en el mejor escudero de Hamilton manteniendo al margen a los dos Ferrari. Gran salida también de Max Verstappen, que se aupó a la octava posición. Poco duró su alegría al verse envuelto en un incidente con Felipe Massa que provocó el pinchazo en un neumático del Red Bull. Mientras, Carlos Sainz era decimotercero y Fernando Alonso decimoquinto.
La batalla por el podio contaba con dos invitados menos habituales: Lance Stroll y Esteban Ocon. Sin embargo, ya en la vuelta ocho Sebastian Vettel había podido quitarse de encima a los dos jóvenes pilotos. Los pilotos de Mercedes sacaron el máximo rendimiento a sus respectivos monoplazas y ya en la vuelta once la ventaja respecto a Sebastian Vettel era de más de ocho segundos. Justo detrás, la batalla por el cuarto puesto midió a Stroll, Ocon y Räikkönen. El fines intentó una estrategia diferente para quitarse de encima a los otros dos pilotos mediante la estrategia.
Fernando Alonso fue preso de la poca potencia del motor Honda y sufrió en todo momento. Incluso vivió una batalla mano a mano con Jolyon Palmer en el que el británico le superó al saltarse una de las chicanes del trazado italiano. La acción fue investigada por los comisarios y se saldó con una penalización de cinco segundos, sin embargo, no tendría incidencias en el desarrollo de su carrera ya que se vio obligado a parar su Renault pasado el ecuador de carrera.
Así la cosas, las paradas en boxes se fueron sucediendo y las diferentes estrategias fueron determinando las posiciones en la tabla. El poderío de los Mercedes les posibilitó jugar con la parada sin poner en riesgo las posiciones de los pilotos. Daniel Ricciardo fue uno de los nombres del gran premio al remontar hasta la tercera posición, a falta de realizar su parada. Cuando pasó por boxes no sólo se incorporó en la quinta posición, sino que pudo atacar a Kimi Räikkönen para superarle en la primera frenada. Stoffel Vandoorne fue el segundo de los abandonos. Su motor dijo basta y dejó tirado al belga, que estaba realizando una carrera notable. Mismo destino para Alonso, que a falta de dos vueltas abandonó la carrera. La paciencia se agota y el equipo de Woking busca una alternativa para motorizar sus monoplazas de cara a próximas campañas.
Las últimas vueltas pusieron contra las cuerdas el tercer puesto de Sebastian Vettel, sin embargo, el alemán contaba con una ventaja de cuatro segundos respecto a Ricciardo. El australino firmó las últimas vueltas rápidas de carrera mientras trataba de dar caza al de Ferrari, que pudo mantener el tercer escalón del podio y minimizar así la pérdida de puntos respecto a Lewis Hamilton.