Un año más, el equipo más precario de la Fórmula 1 ha conseguido terminar una temporada, no sin muchos problemas y muchos sobresaltos siempre con la memoria de Jules Bianchi en cada curva, en cada recta de cada circuito del Mundial. Un español, Roberto Merhi se ha sumado a la causa consiguiendo unos resultados bastante interesantes y, sobre todo, batiendo a su compañero de equipo casi en la totalidad de esta edición.
La pretemporada de Manor
La escudería Manor empezó con grandes dificultades su andadura en la temporada de Fórmula 1 2015. Al grave estado de su ídolo y compañero Jules Bianchi hay que sumar que hasta muy tarde no tenían más que un piloto, el británico Will Stevens. Fue entonces cuando el equipo contrató los servicios de un español, el castellonés, Roberto Merhi para poder formar el equipo. La pretemporada fue dura, sin poder apenas rodar, y llegando a Australia sin saber si el coche les podría arrancar.
La temporada de Manor
Manor, el equipo con menor presupuesto de la parrilla de F1, realizó una temporada en la que, por desgracia, lo único reseñable ha sido la fiabilidad. No han tenido muchos fallos mecánicos y los dos pilotos han podido finalizar casi todas las pruebas. A lo largo de la temporada hemos visto como el piloto número 1 ha sido batido casi constantemente por el número 2. La temporada de Roberto Merhi se puede decir que ha sido un éxito a pesar de las prestaciones de su monoplaza, lo cual da una muy buena sensación a la parroquia española que piensa que el futuro del país en la Fórmula 1 puede llegar lejos, sólo hace falta, a veces, un poco de suerte. Por su parte, Will Stevens completó una temporada que se podría calificar como adecuada, buena. Cumpliendo con las expectativas que el equipo tenía sobre él y ayudando mucho tanto a Merhi como al resto del equipo a evolucionar de manera favorable y dentro de sus limitaciones el monoplaza.
La anécdota de 2015
Se suele denominar anécdota como algo divertido o risueño que le sucede a alguien en relación con algo. Lamentablemente, la anécdota del equipo Manor durante esta temporada no es algo que provoque risa, más bien todo lo contrario, ni siquiera, si me permiten, se puede considerar anécdota. El 17 de julio de este año 2015 fallecía Jules Bianchi, una muerte que ha golpeado de lleno los muros de la F1 en todo el mundo y ha provocado el replantearse muchas cosas. Durante la celebración del Gran Premio de Hungría los monoplazas Manor iban decorados con recuerdos de aquel piloto perteneciente a esta escudería, que tuvo ese desafortunado incidente durante el Gran Premio de Japón de 2014 y tras una larga agonía en la cama de un hospital de Niza (Francia) nos dejó.
Los conflictos de Manor
Las controversias en Manor llegaron de forma inesperada a raíz del Gran Premio de Rusia cuando se anunció que Roberto Merhi iba a ser relegado de su posición de piloto y sustituido por el piloto estadounidense Alexander Rossi para las carreras de Estados Unidos yMéxico. Los enfados llegaron más por la parte del aficionado que no entendía muy bien ese “cambio de cromos”, sobre todo cuando era el español el que estaba cuajando los mejores resultados para el equipo, pero así son los negocios, ya que los pilotos, entre ellos Merhi (el gran perjudicado), no mostró ni un ápice de malestar por esa situación. Se lo tomó como un pequeño descanso pudiendo disfrutar de las carreras en la cabina de Movistar + como comentarista.
El futuro de Manor
El futuro de la escudería Manor, a pesar de que pudiera parecer incierta por su precariedad, lo cierto es que ha anunciado que la próxima temporada continuará en la categoría reina del automovilismo mundial con un cambio en el proveedor de motores que pasará a ser Mercedes, lo cual supone una gran inyección de moral y unas ganas locas de intentar, por lo menos, reducir esa distancia que los separa del resto del pelotón.