Se descongelan los motores con más tokens y se abre la veda a las unidades de 2015. La FIA, tras la reunión con los motoristas, mete marcha atrás y cambia las normas de los propulsores de 2016.
La reunión de este jueves en Suiza entre la FIA y los motoristas de la Fórmula 1, Renault, Ferrari, Mercedes y Honda, traerá grandes cambios en el reglamento presentado hace sólo dos días por el máximo organismo del automovilismo. Los asistentes a esa reunión han sido: Toto Wolff (Mercedes), Maurizio Arrivabene (Ferrari), Yasuhisa Arai (Honda) y Cyril Abiteboul (Renault).
La primera, y más significativa, es la descongelación de los motores. Las fábricas podrán trabajar durante la temporada y cada motor contara con 32 tokens para ser evolucionado durante la temporada. Sin duda, una medida que ayudará a franceses, italianos y japoneses a terminar con la hegemonía de Mercedes-Benz.
Además, se anula la prohibición de los motores de 2015 durante la siguiente temporada, una decisión clave para la parrilla. Esta norma abre de nuevo la puerta a las escuderías de Red Bull, que actualmente se encuentran en negociaciones con Ferrari para usar sus motores en 2016. De echo, muchos rumores apuntan a un posible acuerdo entre Toro Rosso y los de Maranello para usar su actual motor el año que viene.
Todos estos cambios aún tienen que ser aprobados por el Consejo de la Formula 1, en consenso por todos los equipos, y fijados en el reglamento definitivo de la FIA. Pero estas noticias abren una nueva esperanza para aquellos que luchan para acabar con el liderato de Mercedes y para las escuderías Red Bull Racing y Toro Rosso, a los que les facilita la búsqueda de un motor para 2016.